Ministro francés acusado de corrupción rechaza dimitir
Notimex, 31 de mayo de 2017
París.- El ministro francés para la Cohesión Territorial, Richard Ferrand, uno de los principales miembros del gobierno y muy cercano al presidente Emmanuel Macron, rechazó hoy dimitir por el escándalo de corrupción en el que está implicado.
En declaraciones a medios locales, el considerado la “mano derecha” del nuevo mandatario francés durante la pasada campaña de las elecciones presidenciales, afirmó este miércoles que no renunciará a su cargo, y aseveró que es una persona “honesta”.
“Mi conciencia es para mí”, afirmó Ferrand, quien desde hace una semana se encuentra en el ojo del huracán luego de que la prensa publicó que incurrió en varios conflictos de interés cuando dirigía la firma Mutuales de Bretaña.
Según las fuentes, en ese periodo concedió la renta de una sede de la empresa a una compañía dirigida por su esposa en 2011. Además, cuando dirigía la mutual, esta concedió varios contratos más a su esposa.
Ferrand, responsable de la selección de los candidatos a las elecciones legislativas del movimiento del presidente Macron, también está acusado de haber recibido dinero como consultor de su sucesora en la dirección de la empresa, presuntamente a cambio de un empleo para su esposo.
La Justicia no ha abierto ninguna investigación por el momento, pero los medios de comunicación y la oposición política francesa criticaron duramente al ministro del que líderes del partido ultraderechista Frente Nacional llegó a pedir su dimisión.
Ferrand afirmó este miércoles en su defensa que lo sucedido ocurrió en otra época profesional de su vida, y afirmó que había sido validado por un consejo de administración y que había sido legal y publicado con transparencia.
La noche del martes, el primer ministro Edouard Phillipe afirmó que pese a las acusaciones mantenía la confianza en Ferrand, quien seguirá formando parte del Ejecutivo.
«Richard Ferrand puede permanecer en el gobierno», declaró Phillipe, pero precisó que si es “inculpado” judicialmente deberá dimitir.
Mientras este miércoles, el presidente Macron dijo que la prensa no puede convertirse en “juez” en este tipo de casos.
El caso de Ferrand provocó que el gobierno decidiera posponer el examen del proyecto de ley sobre la moralización de la vida pública que pretende luchar contra la corrupción política en Francia.
El escándalo podría afectar al movimiento político de Macron en las elecciones legislativas de junio. Varios sondeos publicados el martes pronostican que el movimiento político de Macron obtendrá, no obstante, la mayoría absoluta en los comicios.
