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Respaldan birmanos a Ejército en su lucha para expulsar a rohingyas

Respaldan birmanos a Ejército en su lucha para expulsar a rohingyas

Notimex, 29 de octubre de 2017

Rangún.- Cientos de miles de birmanos marcharon hoy por el centro de esta ciudad para defender al Ejército de Myanmar y respaldar su lucha para expulsar a los musulmanes rohingyas del país.

Pese a las crecientes críticas de la comunidad internacional por la represión que lleva a cabo el Ejército contra la etnia Rohingya, que ha provocado la huída de más de 600 mil personas a la vecina Bangladesh desde agosto pasado, los birmanos recorrieron las calles mostrando su apoyo a los militares.

Con pancartas y banderas nacionales en mano, los manifestantes caminaron en Rangún, antigua capital de Myanmar, mostrando su felicidad porque -consideraron- regresó la seguridad al país, según un reporte de la televisión Al Yazira.

Los participantes en la caminata también expresaron su apoyo a la líder de facto Aung San Suu Kyi y a su partido, la Liga Nacional para la Democracia (NLD, por sus siglas en inglés), y agradecieron por no dejarse intimidar por la presión extrena.

«Si los militares van en contra de la NLD, la gente siempre va con la NLD y Aung San Suu Kyi, pero ahora vamos juntos con los militares», comentó una de los participantes en la protesta.

Los manifestantes portaban pancartas alabando al comandante en jefe del Ejército, Min Aung Hlaing, y reprendiendo a la comunidad internacional por «presionar al Tatmadaw», como se conoce al Ejército en Myanmar (antes Birmania).

«El Tatmadaw es esencial para el país, protege nuestros grupos étnicos, razas y religión», dijo otra manifestante en el mitin posterior que se dio en la emblemática plaza Pagoda de Sule.

Más de 600 mil rohingyas han huido del estado occidental birmano de Rakhine hacia el vecino Bangladesh desde el 25 de agosto pasado, cuando el Ejército lanzó una ofensiva contra militantes del grupo minoritario, acusado de actos de violencia.

El alto comisionado de la ONU para los Derechos Humanos, Zeid Ra’ad al Hussein, ha expresado su preocupación por la «limpieza étnica» contra los rohingyas y posibles crímenes contra la humanidad cometidos por el Ejército de Myanmar.

De acuerdo con relatos de rohingyas que lograron llegar a Bangladesh, los soldados birmanos disparan a sangre fría contra los civiles y prenden fuego a las viviendas, arrasado con pueblos enteros en Rakhine con la ayuda de turbas de creyentes budistas.

Sin embargo, el Ejército niega dichas acusaciones e incluso la propia Suu Kyi asegura que existe «un enorme iceberg de desinformación» sobre la situación que se vive en Rakhine, lo que complica el conflicto.

La Premio Nobel de la Paz 1991, ícono de la democracia en Myanmar, ha sido duramente criticada por su indiferencia ante la violencia y represión que el Ejército ha llevado a cabo en las últimas semanas contra los musulmanes rohingyas, que es calificada como una limpieza étnica.