Pepesca, especie de temporal y tesoro culinario de la cuenca del Papaloapan
Alejandro Narváez, 6 de noviembre de 2025
Tres Valles, Ver.- La cuenca del Papaloapan conserva una de las tradiciones más representativas de su gente: la pesca de la pepesca, una especie pequeña pero de gran valor cultural y económico. Esta actividad, que se intensifica tras las crecidas de los ríos en los meses de octubre y noviembre, marca el inicio de una temporada esperada por numerosas familias que encuentran en ella una fuente de sustento y un vínculo con su entorno natural. La abundancia temporal de estos peces permite que comunidades ribereñas mantengan viva una práctica ancestral que combina el esfuerzo, la gastronomía y la identidad regional.
En las orillas del majestuoso Papaloapan, hombres y mujeres lanzan sus redes con esperanza, obteniendo especies como robalo, mojarra y, sobre todo, la tradicional pepesca, considerada un verdadero manjar culinario en la región. Alejandra Rincón Jiménez, pescadora y comerciante, recorre distintos municipios de la cuenca comercializando este apreciado producto que alcanza hasta los 200 pesos por kilo limpio. “Cuando la temporada es buena, logro pescar entre 10 y 15 kilos diarios; otras veces sólo 5, pero siempre dejo un poco para mi familia”, relata con orgullo.
Además de su sabor y alto contenido nutricional, la pepesca representa una importante fuente de ingreso para decenas de familias que dependen de su pesca y venta. Su aprovechamiento responsable no sólo contribuye a mejorar la economía doméstica, sino que también fortalece el tejido social y promueve la conservación de los ecosistemas acuáticos del Papaloapan, reafirmando la relación armónica entre el ser humano y el río que da vida a toda la región.
