Vázquez Mota se deslinda de investigación a familiares
, 28 de marzo de 2017
Fermín Ramírez
Ciudad de México, 27 de marzo de 2017.– La candidata del Partido Acción Nacional (PAN) a la gubernatura del Estado de México, Josefina Vázquez Mota, se deslindó de la investigación que realiza la Procuraduría General de la República (PGR) por un tema de presunto lavado de dinero que involucra a su padre y seis hermanos.
“Nunca he estado involucrada en ninguna conducta indebida. Mi familia es como muchas otras que con honestidad y trabajo han salido adelante”, subrayó Vázquez Mota.
Al referirse a la información publicada ayer por El Universal sobre su familia, dijo que el PRI y el gobierno demuestran su miedo a perder la elección en el Estado de México, “por eso recurren a la guerra sucia, a las calumnias, mentiras y al uso faccioso de las instituciones públicas”.
Acompañada en rueda de prensa por el dirigente nacional de su partido, Ricardo Anaya Cortés, la candidata al gobierno mexiquense, afirmó que el PRI pretende retener la gubernatura a través de “una burda elección de Estado” y remarcó: “Tienen miedo, porque ocho de cada diez mexiquenses queremos un cambio y yo estoy lista para encabezarlo. Saben que vamos a ganar esta elección y por eso quieren engañar a los ciudadanos”.
Aseguró que el candidato del PRI, Alfredo del Mazo Maza, representa a “una camarilla”, de “las mismas familias de siempre” que han entrado a la contienda electoral “para apoyar al primo del presidente Peña Nieto”.
Enfatizó: “Yo no tengo miedo y quiero decirlo fuerte y claro: nada ni nadie me va a detener”.
Ricardo Anaya dijo en la reunión informativa que “Josefina Vázquez Mota, hoy más que nunca, cuenta con todo el apoyo y respaldo de Acción Nacional”.
Por su parte, el presidente del PAN en el Estado de México, Víctor Hugo Sondón, recordó que el actual titular de la Unidad de Inteligencia Financiera de la Secretaría de Hacienda (que generó la denuncia ante la PGR en contra de familiares de Vázquez Mota), Alberto Bazbaz, era el procurador del Estado de México cuando ocurrió el dramático caso de la niña Paulette, por lo que, en caso de utilizar su actual función con fines electorales, su credibilidad sería nula.
