Xalapa, Veracruz, México, a viernes 29 de marzo de 2024

Se preparan xalapeños para rituales del primer viernes de marzo; Iglesia católica en desacuerdo

Se preparan xalapeños para rituales del primer viernes de marzo; Iglesia católica en desacuerdo

Leticia Silva, 1 de marzo de 2018

Xalapa, Ver.- Mientras las personas que se dedican a la venta del fetichismo, aseguran que esas actividades están ligadas a la religión católica, la iglesia no avala esas prácticas y pide a la feligresía no dejarse sorprender.

Amuletos, sales, aguas mágicas, bálsamos, brebajes, talismanes, amén de limpias, lecturas de carta, granos o semillas, baños de hierbas aromáticas, curas, rompes y amarres son tradiciones, prácticas y adquisiciones propias de este primer viernes de marzo.

Esoterismo, magia, brujería, santería y misterio es lo que para muchos significa la conmemoración y oportunidad del primer viernes de marzo de cada año; propicia el incremento de sus ventas.

En el mercado Jáuregui de Xalapa, hay un pasillo dedicado exclusivamente a la venta de servicios y productos propicios para los amantes del misterio y la hechicería.

Patricia Anguiano Sandoval está en el negocio familiar por tradición y dogma, y asegura que, aunque muchos han radicalizado estas prácticas, estigmatizándolas como malignas, son costumbres religiosas.

Por su parte, el vocero de la Iglesia católica, José Manuel Suazo Reyes, desmiente el sentido de la conmemoración del primero de marzo y sobre todo las prácticas que están muy lejos de los dogmas de fe, que practica y manda la iglesia católica.

Sin embargo, es real que en estas fechas las ventas se incrementan, velas, hierbas, inciensos, amuletos, curas, limpias, lecturas, trabajos de sanación, todo es requerido  por quienes buscan solución fácil a la mala suerte, la falta de empleo, de amor y sobre todo de dinero y es que quienes expenden estos productos aseguran tener la cura perfecta para muchas enfermedades, comercializan lociones que prometen éxito en sus negocios y trabajos, protección contra las envidias y la mala suerte y el éxito para lograr el amor eterno y verdadero, todo para conquistar al ser amado.

Ante esto, la Iglesia hace un llamado a su feligresía, para que no se deje enganchar por el canto de las sirenas.