Demandarán a EUA por permitir desechos tóxicos en el Golfo de México

Notimex, 8 de diciembre de 2017

Dallas.- La organización ecologista Centro para la Diversidad Biológica anunció que interpondrá una demanda contra la administración del presidente Donald Trump por permitir que las compañías petroleras viertan los desechos del proceso de fracturación hidráulica (fracking) en el Golfo de México.

«La administración Trump está dejando que la industria petrolera convierta nuestros océanos en vertederos de desechos tóxicos”, dijo Kristen Monsell, abogada del centro ecologista.

La Agencia de Protección Ambiental de Estados Unidos (EPA) finalizó en septiembre pasado un permiso de la Ley de Agua Limpia para las plataformas de petróleo y gas mar adentro que operan en aguas federales frente a las costas de Texas, Luisiana y Mississippi.

El permiso permite a las compañías petroleras verter cantidades ilimitadas de fluidos de desecho, incluidos los productos químicos involucrados en el fracking, en el Golfo de México.

“Se supone que la EPA protege la calidad del agua y no ayuda a contaminar el Golfo. Es hora de que las cortes recuerden a esta agencia que su misión es salvaguardar el medio ambiente y la salud pública», señaló Monsell en un comunicado.

El Centro para la Diversidad Biológica presentó este jueves un aviso formal de intención de demandar, en el cual destacó que la aprobación del permiso por parte de la EPA, sin estudiar los riesgos para las especies en peligro en el Golfo de México, es una violación de la Ley Federal de Especies en Peligro de Extinción.

Los productos químicos del fracking y otros contaminantes representan graves problemas ecológicos, ya que el Golfo de México proporciona un hábitat importante para las ballenas, las tortugas marinas y los peces, además de ser un hábitat crítico designado federalmente para las tortugas bobas en peligro, explicó la organización ecologista

Agregó que los delfines y otras especies en el Golfo aún sufren los persistentes efectos del derrame de petróleo del pozo Deepwater Horizon en 2010.

Las aguas federales frente a Texas, Luisiana y Mississippi albergan la mayor concentración de actividades de perforación de petróleo y gas costa afuera en el país.

Las compañías petroleras descargaron más de 75 mil millones de galones de aguas residuales en estas aguas solo en 2014, de acuerdo con registros federales.

Los registros también muestran que el fracking ha ido en aumento en el Golfo de México, y que la EPA no ha realizado ninguna revisión significativa de los impactos ambientales del vertido de residuos de la fracturación hidráulica.